La metodología BIM va incorporándose poco a poco en la ejecución de proyectos de construcción. Principalmente en contratación pública distintas Administraciones están incluyendo requisitos BIM en los pliegos de licitación. Y es de suponer que esta demanda irá en aumento cuando la Comisión Interministerial para la incorporación de la metodología BIM se ponga en marcha.
Esto puede suponer un apuro para las Administraciones, consultores proyectistas, contratistas y proveedores que no estén preparados para poder atender la ejecución de estos contratos con requisitos BIM.
Hasta ahora la preparación se ha centrado principalmente en el manejo de programas informáticos de modelado 3D, llegando a confundir saber modelar con dominar BIM.
Y no se han considerado los objetivos de la Propiedad cliente, que quiere alcanzar con el empleo de la metodología BIM en todo el ciclo de vida del proyecto, ni las necesidades de información que requiere para tomar mejores decisiones y poder alcanzar estos objetivos.
Esto puede ser especialmente problemático en el caso de Propiedades y Administraciones sin conocimiento de BIM, que quieran o tengan la necesidad de utilizar esta metodología.
Pues desconocen cuáles son los requisitos que pueden y deben recoger en sus pliegos de licitación, y como hacer el seguimiento y control de estos requisitos en la fase de ejecución del contrato.
Un asesor BIM independiente designado en las primeras etapas del proyecto puede ayudar a la Propiedad, inicialmente, a conocer que le puede suponer la implantación de la metodología BIM y decidir en función de esta información si adoptarla o no.
En el caso de decidirse a implantarla el asesor BIM ayudará a fijar los objetivos a conseguir en todo el ciclo de vida del proyecto y definir como BIM va a colaborar a conseguirlos, como por ejemplo reducir costes, mejorar la operativa, facilitar el estudio de alternativas, etc. Un modelo 3D por sí solo puede ayudar a conseguir objetivos, pero no es un objetivo en sí mismo.
El asesoramiento es particularmente importante en el inicio del proyecto cuando la Propiedad debe fijar la información que necesita recibir para la gestión del proyecto en sus diferentes etapas. Los Requisitos de Información (EIR en argot BIM) deben recogerse en el Pliego de Prescripciones Técnicas del contrato.
Los Requisitos de Información incluirán detalles sobre : los procesos de gestión del proyecto, gestión de los modelos, estándares a utilizar, definición de los entregables, características de los modelos, gestión de la información, recursos humanos y materiales necesarios, aseguramiento de la calidad, etc. Y la forma y plazos de presentarlos. La definición de todos estos requisitos pueden resultar difíciles para una Propiedad sin dominio de BIM.
La respuesta a los Requisitos BIM de los proveedores se realiza mediante la presentación de un Plan de Ejecución BIM (PEB ó BEP), que permite conocer y evaluar el enfoque y capacidad para cumplirlos.
El asesor BIM puede ayudar a verificar que los Planes de Ejecución BIM cumplen los requisitos exigidos. Y durante el desarrollo del proyecto verificar el cumplimiento de lo planificado.
En los roles BIM que se manejan habitualmente, no aparece el asesor BIM que puede ser de gran ayuda para una Administración Propiedad, particularmente en las primeras fases de un proyecto. Un asesor BIM debe ser capaz de :
- Interpretar las necesidades estratégicas y de negocio de la Propiedad
- Comprender y tener experiencia en todo el proceso de desarrollo del proyecto, desde la planificación inicial hasta el mantenimiento y operación.
- Independiente de los programas informáticos
- Asesorar sobre la evaluación de la competencia y la capacidad de los proveedores
- Comprender claramente que BIM no es solo modelar en 3D
- Asesorar sobre mejora de procesos y soluciones tecnológicas
- Identificar y evaluar necesidades de formación
- Asesorar sobre la captura y uso más efectivo de la información.