A la hora de relacionar las actividades que integran el cronograma tenemos distintas herramientas y posibilidades de relación. Y ¿cual utilizar? he querido recoger unos criterios para hacer estas relaciones que os cuento a continuación.
Una herramienta es utilizar los grafos en los que las actividades se representan mediantes nodos y se unen mediante flechas que indican la vinculación
Inicialmente la relación entre dos actividades relacionadas es que una se inicia cuando acaba la precedente. Esto se conoce como relación FIN-INICIO.
Por ejemplo: No se puede iniciar una obra hasta que no está aprobado el Plan de Seguridad y Salud. Luego la relación será Fin-Inicio. Se representa de la siguiente manera:
Sin embrago lo normal es que en la obra se “solapen” la ejecución de actividades y que no haya que esperar a tener totalmente acabada una actividad para comenzar la sucesora.
Así se pueden dar relaciones COMIENZO-COMIENZO. Una actividad no puede comenzar hasta que no ha comenzado la predecesora. En una calle donde la calzada va limitada por bordillos colocados sobre la capa de base de zahorra artificial, la duración prevista para el extendido de la capa de base es de 6 días y la colocación de bordillos es de 10 días. Una actividad es sucesora de la otra y no hay porque esperar a terminar de extender el último m3 de base para empezar a colocar el primer bordillo. Fijando un margen de 2 días mínimos para empezar a colocar bordillo tras haber finalizado el extendido de la base. La colocación de bordillos puede comenzar a los dos días de haber comenzado el extendido de base. Así facilitamos el solape de actividades dando la duración total de estas actividades 12 días frente a los 16 días suma de las duraciones individuales.
Relaciones FIN – FIN. Una actividad no puede finalizar hasta que no ha terminado la anterior. Por ejemplo en el tramo de calle la capa de aglomerado se extiende entre dos encintados de bordillos. La colocación de bordillos es predecesora del extendido de aglomerado. Sin embargo no tengo que esperar a acabar de colocar el último bordillo para comenzar a extender la primera tonelada de aglomerado. Se podrá fijar un desfase de 2 días mínimo para extender aglomerado en un punto desde que se colocó el bordillo. Cuando la duración de la colocación de bordillos (p.e. 10 días) tiene más duración que el de la capa de aglomerado (p.e. 4 días).
La relación FIN-FIN entre el final de la colocación de los bordillos y el final del aglomerado nos permite solapar las actividades teniendo en conjunto una duración de 12 días frente a los 14 días suma de las dos actividades.
Relaciones COMIENZO-FIN. Es una relación rara que se utiliza muy poco. Una actividad no puede finalizar hasta que la predecesora haya comenzado. La actividad que se ejecuta en el tiempo antes es dependiente de la que se ejecuta después. Por ejemplo si estoy preparando un examen, la actividad dependiente es estudiar. No voy a finalizar de estudiar hasta que comience el examen. Si la relación que se ha puesto es Estudio Fin -Comienzo Examen, y el examen se retrasa por estar relacionado con otra actividad, la actividad Estudio no se mueve, finalizaríamos el estudio y quedarían 4 días sin estudiar hasta el examen, lo cual rompe las reglas del estudiante.
Con la relación Comienzo-Fin además de cumplirse la lógica de que el estudio es dependiente del examen y se estudia por el examen, al modificar la fecha del examen también se “arrastra” la fecha de fin de estudio
Entonces ¿Cuándo emplear cada una?
- Fin comienzo. Actividades imperativas que no pueden solaparse, o que utilizan el mismo recurso y no lo pueden compartir.
- Comienzo – comienzo. La actividad sucesora tiene más duración que la predecesora y es posible realizar las dos actividades solapadas.
- Fin – fin. La actividad sucesora tiene menos duración que la predecesora.
- Comienzo-fin. Muy rara. Cuando se programa de atrás hacia adelante
No me gusta emplear la relación FIN-COMIENZO con retraso negativo que también permite solapar las actividades. Me gustaría conocer vuestra opinión sobre esta relación.